Bicentenario del nacimiento de J. Usera
El día 15 de septiembre de 1810 nacía en Madrid Mariano Usera y Alarcón, popularmente conocido como P. Usera y reconocido por la Iglesia como Venerable Jerónimo Mariano Usera.
El ambiente familiar, de vasta cultura y profunda fe, hacen de Mariano una persona de múltiples facetas. Sacerdote, misionero y fundador desarrolla con amor, pasión y sin sosiego su servicio a Dios, a la Iglesia y a la Humanidad, tanto en España como en África y América.
Es reconocida su capacidad organizativa, como admirable es la fortaleza que tiene en todo momento y que se pone constantemente a prueba por la enfermedad contraída en África y que no lo abandonó. Eso lo hace más humano, menesteroso y necesitado. Eso sí, logra olvidarse de sí y entregarse a quienes más lo necesitan.
El P. Usera comienza sorprendiéndote al hacerse monje (donde cambia de nombre) y terminas caminando a su lado porque a medida que lo conoces, descubres que la fuerza de su vida interior te invita a cuestionar la tuya a la luz del Amor. Los hombres y mujeres del tercer milenio buscan testigos de lo más humano, el amor. J. Usera resulta luminoso y cercano, atrayente y convincente: caminará a tu lado, te dará calor de amistad y esperanza para seguir avanzando y creyendo en el Amor, sin pedir nada a cambio.
Su lema: “Decir la Verdad y hacer el Bien”, se convierte en ley motiv de cuantos se acercan a la vida y obra de este gran hombre.
La familia Amor de Dios celebramos el bicentenario de su nacimiento desde el gozo y la gratitud. Hemos sido atraídos por su vida y asumimos el compromiso de trabajar como él por el crecimiento espiritual y humano de nuestro mundo, especialmente en favor de los más desfavorecidos.
Hna. Margarida Martins da Silva
Superiora General de las Hermanas Amor de Dios
PINCELADAS DE LA VIDA DEL PADRE USERA
- 1810 Nació en Madrid el 15 de septiembre y fue bautizado el día siguiente con el nombre de Mariano Nicomedes.
- 1825 Hace su profesión religiosa el 4 de marzo en la Orden del Cister, Monasterio de Oseira, con el nombre de Jerónimo.
- 1834 Se ordenó de presbítero en el Monasterio de la Orden de Santiago en Uclés (Cuenca), el día 20 de septiembre.
- 1837 Septiembre. Es obligado a dejar el convento, en virtud del decreto de exclaustración.
- 1844 Febrero. Ingresó en la Sociedad Económica Matritense de Amigos del País, en Madrid.
- 1845 El día 28 de julio, se embarcó rumbo a Guinea Ecuatorial, como misionero; y arribó a Fernando Poo, el 25 de diciembre.
- 1846 El 25 de marzo, se embarcó en Fernando Poo, rumbo a España, gravemente enfermo; llegó a Madrid en julio.
- 1848 El 11 de noviembre tomó posesión de una canonjía en la Catedral de Santiago de Cuba, iniciando una intensa labor apostólica en la Isla.
- 1849 El 4 de abril tomó posesión del Vicariato general y Gobierno de la Diócesis.
- 1853 El 3 de diciembre tomó posesión del Deanato de Puerto Rico.
- 1858 El 23 de marzo fundó la Asociación de Damas de San Ildefonso y la Casa de Caridad y Oficios para la educación de niños pobres de Puerto Rico.
- 1860 El 21 de enero el Obispo de Puerto Rico le autorizó a trasladarse a la Península en búsqueda de religiosas para la Casa de Caridad y Oficios.
- 1864 El 27 de abril, fundación de la Congregación de las Hermanas del Amor de Dios, en Toro (Zamora). Al día siguiente, se abre el primer Colegio “Amor de Dios”.
- 1865 El 24 de diciembre tomó posesión del Deanato de la Catedral de La Habana (Cuba).
- 1883 Aprobación del Reglamento de la Sociedad Protectora de los Niños de la Isla de Cuba y aprobación para fundar dicha Sociedad.
- 1891 Inauguración de la Academia de Tipógrafas y Encuadernadoras, el 10 de mayo.
- 1891 A las 7h de la mañana del 17 de mayo falleció el Padre Usera en La Habana.
- 1999 El 28 de junio, el papa Juan Pablo II promulgó el Decreto sobre la heroicidad de virtudes del Venerable Padre Usera.
TESTIMONIOS
“El Excmo. e Ilmo. Sr. D. Jerónimo Mariano Usera ha muerto pobre, muy pobre, porque nunca llamó a su puerta una necesidad que no fuera al instante socorrida.” En: Diario de la Marina. La Habana, 18 de mayo de 1891.
“Era muy humilde y muy caritativo; todo lo daba a los pobres; un día le dio hasta los pantalones, quedándose con la sotana; le gustaba mucho hacer el bien, pero muy ocultamente, que nadie lo supiera. Era muy activo y gracioso.” Dña. Pilar Usera Valle, sobrina del Padre Usera. En: Posito, pg. 481.
Las mismas obras de Apostolado fueron para él una excelente vía para avanzar en el camino de la santidad. En: Decreto sobre virtudes del Venerable Siervo de Dios Jerónimo Mariano Usera y Alarcón. Roma, 28 de junio de 1999.
Fue hombre sabio y prudente en sus palabras, en sus propuestas y consejos, en las obras y en las razones para avanzar en la imitación de Cristo y en la obediencia a la voluntad de Dios. Decreto sobre virtudes del Venerable Siervo de Dios Jerónimo Mariano Usera y Alarcón. Roma, 28 de junio de 1999
SiGnificado del Logo del Bicentenario del nacimiento de Jerónimo Usera y AlArcón.
Color azul: el color de la placidez y del sosiego, del cielo, del mar y del infinito.
Descanso para la vista que busca el horizonte cuando el mundo de cada día se queda pequeño, tan lleno de rutinas y vulgaridades: (…) “dame, Señor, más dilatados horizontes…” (Usera).
AZUL: el color elegido para el hábito de las Hermanas del Amor de Dios. Así se dieron a conocer cuando empezaron a hacerse presentes por caminos, pueblos y ciudades. Aquí el azul se despliega como la vela de un barco por todo el mundo: África, Europa, América, Asia…
Nació para hacer el BIEN.
Usera lo tuvo claro, lo demostró con su vida generosa, sus quehaceres. Hoy, después de 200 años, todavía hablamos de ello. Dejó huella. Desde el mismo símbolo del Bicentenario que celebramos, la declaración del sentido de la vida del P. Usera me interpela con decenas de preguntas:
¿Para qué he nacido yo?, ¿Hacia dónde caminan mis pasos?, ¿Lo que vivo, me lleva de la mano donde debo ir?, ¿Cuál es el verdadero sentido de mi vida?
Una llama blanca que busca la altura, que emite luz y calor porque el fuego del corazón ha prendido. Un corazón donde anidan los anhelos de altura y perfección. El espacio íntimo en el que se entra en comunión con lo más rico y personal, el hueco en el que ponemos nombre a las emociones y los sentimientos. Un corazón que late al ritmo del impulso que no se ha extinguido en 200 años, que ha pervivido cruzando mares y fronteras, razas y credos.
Un corazón donde habitan los sueños. Un SUEÑO -hacer el BIEN- que no debe morir, que sigue siendo nuestro SUEÑO.